martes, 7 de abril de 2015

LUBRICANTES OCULARES


El síndrome del ojo seco es uno de los cuadros oftalmológicos más frecuentes hoy en día. Se trata de una lubricación ocular insuficiente que produce irritación, picor y fuerte sensación de molestia en los ojos. Son varios los factores que pueden desencadenar la aparición de este síndrome, y como no siempre es posible evitarlos, contamos con las llamadas lágrimas artificiales que suponen un importante alivio en la mayoría de los casos. Si se hace necesario recurrir a lubricantes con texturas más espesas como los geles, pomadas y ungüentos oftálmicos, también en este caso su tolerancia es excelente y su eficacia, ampliamente comprobada.


Agentes Viscosizantes
La estabilidad de la película lagrimal depende de sus características físico-químicas, que interactúan con el epitelio conjuntival y corneal a través de mucinas de membrana. En la película lagrimal la capa de mucina se considera como un agente surfactante o humectante que reduce la tensión superficial de la superficie ocular relativamente hidrofobica, dejando las células corneales o conjuntivales humectables.
La capa mucinosa puede servir como zona de lavado o vehículo de almacenamiento para las sustancias secretadas por las glándulas lagrimales accesorias y las células de la superficie ocular, es por eso que los lubricantes hechos a base de agua tienen poca efectividad.

La Carboxilmetilcelulosa es el agente viscosizante polimérico de más amplio uso en concentraciones entre 0,25% y 1%. Este se une a las células epiteliales humanas y es retenida en estas.


Sustitutos de la lágrima
Hay muchísimos tipos de sustitutos lagrimales, pero los que me llamaron la atención fueron los sustitutos lagrimales biológicos. Estos son fluidos de existencia natural, es decir, no son farmacéuticos, y se incluyen el uso de suero o saliva. Normalmente no tienen conservantes. Cuando son de origen autólogo carecen de antigenicidad y contienen varios factores que mantienen la superficie ocular y permiten la proliferación de las células epiteliales primarias de la córnea humana mejor que los preparados farmacéuticos. Una desventaja es la esterilidad y la estabilidad pues es necesario un proceso de producción para llevar el sustituto natural de lágrimas a la superficie ocular.


Otras sustancias sustitutivas de las lágrimas, son la metilcelulosa, la hidroxipropilmetilcelulosa (lacrisert) y el alcohol polivinílico, estas se caracterizan por formar una película protectora sobre la superficie ocular, disminuyendo la fricción entre la córnea y los párpados.


Agentes Mucomiméticos
Existe un colirio que se usa como agente mucomimético, este se adhiere a las membranas epiteliales y proporciona una interfaz entre la superficie corneal y la capa acuosa de la película lagrimal. Proporciona una excelente humectación de la superficie corneal por su tensión superficial similar al de la córnea. Debido a su fuerte afinidad por el epitelio corneal, resiste el movimiento de los párpados y la acción del lavado de las lágrimas naturales, como resultado actúa fortaleciendo y estabilizando la película lagrimal durante un extenso periodo.
Probablemente la mejor evidencia de esto es la capacidad para alargar el tiempo de ruptura de la película lagrimal más allá de 10 segundos (por 90 segundos o más). Con esta prolongada retención en el ojo, los pacientes pueden obtener el alivio sostenido después de cada aplicación.
Naphtears, el nombre del fármaco,  ha sido formulada para ser isotónica con las lágrimas naturales y para tener un pH dentro del rango fisiológico, presenta una baja viscosidad por lo que no produce visión borrosa o formación de costra por el producto en los márgenes palpebrales. El pH es igual a las lágrimas artificiales proporcionando máxima comodidad.
Contiene polyquad como conservador que no causa citotoxicidad asociada a otros conservadores y no inhibe la regeneración celular epitelial.

Agentes Mucolíticos
Los agentes mucolíticos se usan en casos de ojo seco muy severos.

Son substancias que fluidifican el mucus produciendo y manteniendo un mucus laxo.
Parte de la acción de las drogas llamadas mucolíticas actúan sobre la lágrima del mar lacrimal, pero su acción más importante ocurre intracelularmente durante el proceso de formación de la mucina, facilitando su producción y mejorando su calidad. Por ello, la mayoría de los mucolíticos actúan también como normo e hipersecretores mucínicos.
La metil cisteína (Visclair) y la acetil cisteína (Fluimucil) son mucolíticos generalmente dados oralmente para trastornos respiratorios que probablemente aumentan la calidad de la mucina naciente y por ello son usados ocasionalmente en fórmulas magistrales como un tópico ocular para el ojo seco.

Las gotas de acetil-cisteína al 5% se aplican 1 gota de 3-5 veces al día. Sin embrago también puede causar irritación.
La Bromexina 0,1-0,2 % puede usarse 1 gota 3 a 5 veces al día.


Keratoconjuntivitis Sicca
La queratoconjuntivitis Sicca (KCS/QCS) es una enfermedad multifactorial, que afecta la producción de la lágrima y la superficie ocular, que se manifiesta por sintomatología relacionada a malestar, visión borrosa e inestabilidad de la película lagrimal con daño potencial a la superficie ocular. Se acompaña de un aumento de la osmolaridad lagrimal e inflamación de la superficie ocular.
La patogénesis de la queratoconjuntivitis sicca en pacientes con síndrome de Sjögren, está dada por la hiposecreción lagrimal acompañada de la infiltración linfocitaria y los cambios inflamatorios que se observan en las glándulas lagrimales, así como por la presencia de mediadores inflamatorios en la lágrima y la conjuntiva. 


1 comentario:

  1. Ay Ale me encanto tu blog, jaja esta muy padre y la verdad llama mucho la atención! Muy bien nena:)

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